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| Imagen: diariodegastronomia.com |
Necesitamos
4 patatas grandes
2 huevos
1 vaso de leche entera
3 dientes de ajo
90 gramos de aceite
Sal
3 ramas de perejil solo las hojas
Preparamos
1. Comenzamos pelando las patatas y las cortamos en láminas finas como si fuéramos a cocinar una tortilla de patata.
2. Las freímos en una sartén en abundante aceite. Hasta que veamos que comienzan a dorarse pero sin que lleguen. Una vez cocinadas las colocamos sobre la cazuela
3. Cocemos los huevos. Al terminar los pasamos por agua fría para que endurezcan.
4. Ponemos en el vaso los ajos y hacemos 10 segundos / velocidad 7.
5. Ahora añadimos el aceite y hacemos 6 minutos / varoma / velocidad 1. Los ajos no deben llegar a dorarse. Al terminar añadimos el perejil picado y la leche; hacemos 1 minuto / varoma / velocidad 1. Comprobamos como están de sal.
6. Vertemos la mezcla en la cazuela sobre la base de patatas. Le hacemos un hervor y añadimos los huevos cocidos bien troceados. Movemos la cazuela para conseguir que la patata coja el caldo y que no se agarren.
Dejamos reposar diez minutos antes de comerlas.
En Extremadura, por lo menos en mi pueblo, las patatas pobres son fritas y después se rehogan con ajo machado y vinagre, al terminar un poquito de perejil, pero esto ya es opcional. Las probaremos de esta manera también!
En Extremadura, por lo menos en mi pueblo, las patatas pobres son fritas y después se rehogan con ajo machado y vinagre, al terminar un poquito de perejil, pero esto ya es opcional. Las probaremos de esta manera también!