Necesitamos
Helado de queso roquefort
- 6 hojas de gelatina
- agua fría
- 250 g de leche entera
- 500 g de nata (35% de grasa)
- 400 g de queso roquefort
- Una clara de huevo
- Un chorrito de zumo de limón
- 1 cucharadita de sal
- 1 – 2 pellizcos de pimienta molida
Vinagreta de nueces
- 50 g de nueces peladas (y algunas más para decorar)
- 30 g de vinagre
- ½ cucharadita de sal
- 1 – 2 pellizcos de pimienta molida
- 90 g de aceite de oliva
Ensalada
- 400 g de hojas variadas de ensalada (mezclum)
- 200 g de tomates cherry (en mitades)
- 3 – 4 cucharadas de pasas sin semillas
- nueces peladas
Preparamos
Helado de queso roquefort
- Ponga las hojas de gelatina en agua fría para hidratarlas.
- Ponga la leche en el vaso y caliente 2 min/60°C/vel 1.
- Añada las hojas de gelatina hidratadas y escurridas y mezcle 4 seg/vel 5.
- Incorpore la nata, el queso roquefort, la clara, el zumo de limón, la sal y la pimienta. Mezcle 1 min/vel 3. Vierta en un recipiente hermético y deje enfriar. Una vez frío, introdúzcalo en el congelador durante al menos 4 horas. Lave el vaso. Continúe con la receta.
Vinagreta de nueces
- En el vaso limpio y seco, pique las nueces 3 seg/vel 5.
- Añada el vinagre, sal, pimienta y el aceite de oliva y mezcle 20 seg/vel 3.
Ensalada
- En 6 cuencos individuales, disponga las hojas de ensalada, los tomates cherry, las pasas y las nueces. Ponga en el centro una bola de helado, riegue con la vinagreta y sirva.